Un frío y poderoso empresario se pasa la vida destruyendo o favoreciendo empresas y personas. Hasta que un hecho insólito rompe con su rutina y le hace cambiar su visión del mundo. Y empieza a sentir algo desconocido para él: el amor.

 En Blum, una pieza estrenada hace 70 años por Enrique Santos Discépolo y Julio Porter, conviven la comedia, el music hall y el drama, casi como un grotesco de salón. La máscara de la risa que oculta la tragedia, como reza el propio Discepolín en uno de sus legendarios tangos: “Soy un arlequín / un arlequín que salta y baila / para ocultar / su corazón lleno de pena (…) ¡Cuánto dolor que hace reír!”

Como todo buen clásico, Blum aborda temas universales que nos interpelan: la soledad del poder, el desengaño amoroso, el sentido de la vida y la desenfrenada carrera del hombre tras el dinero.

Protagonizada por Humberto Tortonese junto con un numeroso elenco dirigido Mariano Dossena, Blum se estrenó en 2018 en el Teatro Regio y agotó las localidades de todas sus funciones, por lo que se repuso en el Teatro de la Ribera con idéntica repercusión de público.